En mi familia hemos constituido una especie de "comando de
cuidados" porque cuando tienes cerca una persona que los necesita, hay
que repartirse los tiempos... Y es que ¿qué haríamos sin los cuidados?
Aquí un artículo brillante de Marcela Lagarde, los cuidados
son esenciales: humanos, empáticos, solidarios... Pero, recaen en las
mujeres, las invisibilizan, las absorven, las sumergen en la abnegación
tan propia de la feminidad normativa...
Los análisis económicos no
tienen en cuenta que este sistema capitalista liberal tiene una base
patriarcal, y está sostenido en gran parte por aquellas mujeres que
asumen los trabajos que nunca asumió el Estado o la comunidad, y
aquellos que ya no asume...
¡Si nosotras paramos, se para el mundo! ¡Por el reparto de los cuidados! Recomiendo la lectura...
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